domingo, 19 de octubre de 2014

MEMORIA DESCRIPTIVA DE LA PATENTE DE INVENCION



MEMORIA DESCRIPTIVA
TITULO DE LA INVENCION:
NUEVOS PRINCIPIOS EDILICIOS PARA GENERAR ENERGIAS

CAMPO TECNOLOGICO DE LA INVENCION:
Conjunción de edificios, cuyos perímetros son convergentes hacia centros huecos a modo de torres regulares verticalmente o cónicas. En estas torres o centros de energía se pueden generar diversas y enormes cantidades de energías. Estas energías pueden ser de fuerzas de convección, fuerzas vorticales y del tipo metereológico, como por ejemplo, los tornados o ciclones y otras. Así también ser útiles para otros emprendimientos energéticos. Las fuerzas metereológicas pueden controlarse y transformarse en energías de consumo. Dichas fuerzas, así, podrán también ser activadas artificialmente.  Es sabido que un tornado (según la escala de FUJITA), genera tanta energía (NASA) en solamente una hora, como toda la que el hombre produce y consume en un año. Además la disposición de estos edificios o pequeñas villas o ciudades, pueden comportarse como óptimos portadores para el anclaje de medios eólicos de gran porte y captaciones de energías hidráulicas, fotovoltaicas  o receptores de calor solar y otras que se suman a las fuerzas del centro de los edificios. Por otra parte, esta arquitectura se constituye en un medio ideal (además de viviendas, escuelas, hospitales, etc.) para producir bienes de consumo, a bajísimos costos energéticos y lograr así, el rápido retorno de las inversiones. Con estos conjuntos edilicios podrán aprovecharse aguas pluviales, basuras y contaminantes para producir bienes útiles y vendibles que, a la vez, cogeneren energías industriales y generen electricidad, aire acondicionado, aguas frías o calientes y limpias para consumo o energía térmica. Todo lo dicho es posible gracias a que, cada edificio, pasa a comportarse como dispositivo de una gran maquinaria de múltiples procesos y utilidades. Así, por ejemplo, los motores de combustión interna para mover generadores de electricidad, podrán pasar a ser maquinas de “energía total” al aprovechar el 70 % de la energía térmica que estos motores pierden. Estas pérdidas, así como también otros medios de producir energía, podrán mover torres y otras turbinas bajo los principios antes citados, así como por ejemplo, las torres perimetrales de cada edificio. Se contribuirá, así a  evitar el calentamiento global. Las energías de producción y consumo son lo más importantes para nuestro mundo obvio, material y tangible. Pero el mejoramiento en el uso de nuestras energías individuales e interpersonales o sociales son, aún, más importantes para lograr un mundo mejor al actual. Un mundo nuevo será facilitado por estas arquitecturas al recrear otros ámbitos, para una mejor vecindad, mayores puestos de trabajo, mayores ahorros e ingresos, para palear las N.B.I. y las condiciones socioculturales. Actualmente se deben invertir cuantiosos capitales para construir viviendas, comercios, industrias y ámbitos dónde producir y coexistir mejor. Si solamente valoramos (entre muchos otros beneficios) la alta productividad energética de estos nuevos principios edilicios, se puede afirmar (sin equívocos) que: viviendas, puestos de trabajo, industrias, comercios, escuelas, hospitales y tantos otros espacios útiles para las familias, las empresas y los gobiernos, resultarán gratis. Para que todo esto tenga certeza, debemos darnos cuenta (por un lado) de los bajísimos costos de la energía, que podrá venderse a buen precio y que permitirá un retorno rápido de las inversiones (y por otro lado) que una vez amortizados estos edificios, seguirán generando réditos para construir más y más edificaciones como estas. Actualmente se edifica con fines sociales, comerciales y/o financieros cuyos destinatarios, muchas veces, no tienen capacidad para alquilar, para comprar, y/o mantener adecuadamente las viviendas. En la actualidad, si las viviendas se regalaran, resultarían como una herencia con más débitos que créditos para ocupantes de bajos ingresos. Por el contrario, estas viviendas y sus energías pueden aumentar las oportunidades laborales y mejorar, de un modo integral, la economía social y los ingresos familiares. Esta arquitectura, al estar bajo principios sinérgicos, demandará de la conjunción interdisciplinaria de variadas ramas de la ingeniería, la arquitectura, las ciencias humanísticas, las ciencias experimentales y variados artes y oficios para recrear los espacios de viviendas, productivos, energéticos y urbanísticos de un modo totalizador. Es decir, integrador y no fraccionario, tanto en lo humanístico como en lo económico, sociocultural y técnico. En este preciso momento histórico, la fragmentación, la división y, por lo tanto, la marginación y la alienación nos caracterizan. Una mínima parte de los altos réditos de estos edificios servirían para la instalación y sustentabilidad de redes de servicios. Aún cuando se reclaman redes de cloacas pluviales, etc., los destinos de estos efluentes contaminan mares, ríos, lagos, etc. En cambio, estas edificaciones, son autónomas, pueden tratar sus efluentes utilitariamente. Las cloacas y otras aguas, así podrán servir para el agro y también para producir más energía. Son necesarios otros periféricos, tales como vías de accesos, planificación cultural, comunicaciones, agricultura, recreaciones, comercios, industrias, etc. Asimismo instituciones como salud, deportes, espiritualidad, arte, esparcimiento, educación y otras. Todos estos beneficios o recursos surgirán y se podrán pagar con la alta rentabilidad energética, para lograr espacios urbanos que consideren la totalidad del vivir, como por ejemplo, ahorrar miles de horas en viajes para ir al trabajo, y aprovecharlas en educación, deporte, familia, salud, etc. Horas y horas de transporte, vivienda y trabajo son temas troncales y neurálgicos de la realidad actual. Necesitamos urgente e imperiosamente de un urbanismo, una urbanidad que sirva para mejorar nuestros modos de relacionarnos, una ingeniería y una arquitectura evolutiva que nos ennoblezca, individual y socialmente para relacionarnos, conocernos y convivir mejor. Los gastos que estos objetivos y metas demandan, podrán pagarse con estas edificaciones. En la actualidad, las construcciones de edificios son un gasto a “fondo perdido”. Con los nuevos principios edilicios aquí propuestos, podremos lograr nuestros más caros anhelos. A continuación, cito solo algunos usos y beneficios industriales de estos principios: fabricación de cemento, papel, molinos aceiteros y harineros, siderurgia, acopios granarios, industrias agroalimentarias y todas las industrias desde las pequeñas, hasta las industrias básicas. Es de hacer notar, que las industrias, son injustamente castigadas, mundialmente, por sus efluentes y subproductos. Es aquí donde estos principios edilicios serán una gran oportunidad, puesto que podrán brindar servicios de tratamientos y cogeneraciones para los efluentes sólidos, sus subproductos y efluentes líquidos y gaseosos. No existe una oportunidad así, de radicación  industrial, en el mundo entero. Se afirma que son las industrias las que contaminan, pero las estadísticas oficiales, señalan como culpables en un 70% a las redes urbanas y a los vecindarios. Hay casos comunes de destinos al mar, ríos y arroyos urbanos y periurbanos, donde se descargan pluviocloacales, con una gran carga microbiológica que, gracias a que se mezclan con descargas de efluentes industriales, se mueren los gérmenes y se evitan múltiples consecuencias a la salud pública. Estos nuevos principios edilicios evitarán todas estas dicotomías y conflictos que afectan, no solo a lo humano, sino a toda la naturaleza viva y no viva. Estos edificios son la parte estática de una macromaquinaria capaz de tratar el saneamiento como una fuente de riqueza, puesto que producen energías limpias y una gama muy variada de productos útiles y vendibles. Así, es posible una ciudad íntegra. Recordemos qué integro es el todo, y qué quiere decir: sagrado. De este modo, las viviendas, las instituciones y las personas, las empresas y los estados, se integran en una convivencia armónica. Solo así podemos integrar el turismo, el paisaje, los hoteles, los hospitales, las instituciones, la agricultura, la educación, etc. Los hornos industriales, los frigoríficos y todos los factores de la economía, serán convergentes con la producción, la productividad y el buen vivir. Desaparecerán los barrios pobres, los basurales, las aguas sucias y cloacales. Habrá aire frío y caliente, así como agua fría y caliente, para el hábitat y la producción. Todo pasará a ser cogenerable como la naturaleza misma, de la cual tanto se nos escapa; y por eso la traicionamos cotidianamente. Estos edificios, cuanto más pobre e inhóspita sea la zona, más beneficios brindarán. Si se construyen en zonas periurbanas o rurales, sus contribuciones se extenderán a un gran radio de influencia benéfica. Serán centros de fomento y estímulo hasta kilómetros de su radio. Todo crecerá vertiginosamente. La desertización y la erosión se frenarán. Las costas marinas improductivas agropecuariamente, tendrán agua dulce de los mares. Por último, y sin expresar megalomanías, creo que estos nuevos principios edilicios, podrán extinguir las pobrezas socioeconómicas, que están impidiendo que las riquezas superiores de nuestras almas afloren. Es verdad que con solo superar la pobreza socioeconómica no alcanza. Pero esta es la base para poder instaurar una cultura totalmente mejor. Es necesario ayudar a vencer la pobreza y el desamor con recursos más dinámicos, que eviten conflictos, confusiones, contradicciones y violencias. Todo esto está reclamando cada vez más salud mental, justicias, hospitales, policías, cárceles, etc., que pueden evitarse con una planificación cultural gratificante que oferte y demande suficiente trabajo, para generar una auténtica libertad laboral y económica. Valga la ironía de decir que: gracias a los serios problemas energéticos, conoceremos un mundo más abarcativo y más consciente de la totalidad del vivir, que nos ayudará a comprendernos y comprender la realidad que nos circunda.

ESTADO DE LA TECNICA Y LA PROBLEMATICA A SOLUCIONAR
El estado de las técnicas para resolver las problemáticas de edificios, en relación al transporte, vivienda, trabajo, ingresos y otros problemas a solucionar, se encuentran desordenados, insuficientes y/o mal resueltos. En el plano energético, todos sabemos que las fuentes de generación actual, son caras y problemáticas para el medio ambiente. Las energías llamadas libres, punto cero y otras por el estilo, no se aplican, otras veces son inútiles o les falta desarrollo suficiente. Las llamadas energías alternativas son caras e insuficientes. Quedan solo las de combustiones, hidráulicas y atómicas, cuyas problemáticas son altamente conocidas por todos. Según la NASA los vientos a 20 y 30 metros de altura (según geografías) son tres veces más fuertes. Asimismo, son más constantes. Estas ventajas se aprovechan con esta propuesta, tanto en la parte central, que puede ser más alta que los edificios, como en la multiplicidad de torres y otros lugares, para diversas aplicaciones. Pero la mayor ventaja de esta arquitectura es su parte central. Aquí es donde se generan energías, incluso superiores, a todos los medios de generación actual  y,  constituye el fondo principal de la presente novedad. Por otra parte, la solución habitacional, a nivel mundial, está en las edificaciones altas, porque ocupan menos espacios urbanos, disminuyen drásticamente los costos de los servicios,  al disminuir grandes tendidos horizontales de redes y también porque se puede concentrar el tratamiento de sus efluentes; evitar grandes superficies impermeables que producen inundaciones, y ganar espacios agropecuarios o para otros usos. Los grandes espacios urbanos, con baja densidad poblacional no se pueden controlar, asistir, mantener ni sanear adecuadamente.



REIVINDICACIONES
Habiendo descripto y determinado la naturaleza de la presente invención, y el modo de llevarla a la práctica, reivindico como de mi exclusivo derecho y propiedad, nuevos principios edilicios para generar energías.
 1 Nuevos principios edilicios para generar energías que se caracterizan por conjuntos de edificios, cuyos anchos conforman un centro poligonal o redondo, el ancho de cada edificio, su separación entre ellos y la cantidad de edificios, determinará el tamaño de dicho centro, la profundidad de los sótanos y la altura de los edificios, definirá el alto del hueco central, que podrá extenderse hacia más arriba de los edificios, formando una gran torre capaz de generar, dentro de ella, distintas energías por distintas técnicas, los  edificios confluirán hacia el centro de modo semitangencial o tangencial, de este modo el conjunto de edificios proyectará ángulos o deflectores para la captación de vientos en todas sus direcciones, los lados de los ángulos, el ancho, el largo y la altura de los edificios determinarán los tamaños de cada ángulo, el número de edificios será igual al número de estos ángulos o deflectores, cada uno de los edificios se tornará en una sección angular y, por lo tanto de menor tamaño, sobre el centro, para evitar su superposición y permitir  la entrada del aire, estas entradas de aire podrán ser próximas o iguales al ancho de cada edificio, los edificios podrán estar distribuidos preferencialmente en forma tangencial o semitangencial y equidistantes entre sí, cada edificio confluirá hacia y hasta dentro de la torre con un pequeño deflector recto o curvo, y de bajo espesor, para obligar al aire a entrar y, a la vez, evitar su salida, de este modo, el conjunto de edificios captará grandes frentes de aire que serán tanto más fuertes cuando hay más edificios y estos sean más altos y largos, los grandes caudales de aire se conjuntarán en los centros poligonales o circulares, para generar energías del tipo de los tornados, es decir, se trata de reproducir artificialmente fenómenos naturales, sin necesidad de aspas, aún cuando por interferir con otros procesos de uso, puedan tenerlas, pero siempre estas energías necesitan turbinas y generadores en los sótanos; es necesario una protección cerca del centro contra las aves, a modo de rejillas; próximos a las torres podrá haber o no cierres parciales para evitar excesos de energías eólicas o, cierres totales para cuando las torres trabajen por enfriamiento con agua, desde arriba o por convección por calor desde abajo, u otras técnicas en estos últimos casos, no serán necesarias protecciones contra las aves, los edificios podrán terminar en sus extremos, hacia fuera, en forma recta, en forma de ángulo o con torres ciclónicas, accionadas por calor excedente de algún proceso productivo, o torres solares de explotación o no de invernadero, como así también de enfriamiento, las torres perimetrales podrán empezar en los sótanos a mediana altura de los edificios o estar arriba de ellos, estas torres perimetrales pueden extenderse a grandes alturas e instalar en su coronación, generadores del tipo Andreu – Enfield, o tener deflectores para captar el viento desde abajo o desde arriba de las azoteas, los edificios, la torre central y las periféricas, podrán tener sótanos en función de sus destinos y tener ingresos y egresos de vehículos, como también  en especial, para las torres centrales, medios para subir y bajar camiones de gran peso, las torres centrales prolongadas a grandes alturas podrán incluir aerogeneradores, placas solares y prescindir de deflectores, operarán como aceleradores y potenciadores de energías, las torres centrales como las perimetrales pueden no tener entradas de aire, para generar energías por otros medios no eólicos, las torres centrales o periféricas, cuando no dependan de las corrientes de aire atmosférico, sus edificios podrán ser radiales o en otras posiciones, y no necesariamente semitangenciales o tangenciales; habrá calles vehiculares y/o peatonales para vincular los edificios.
2 Principios edilicios para generar energías, conforme a la reivindicación primera, caracterizados porque los edificios, con o sin separación entre ellos, podrán unificarse y consolidarse estructuralmente entre sí, por medio de uniones o vigas en el perímetro de la torre central y/o próximas a ella; así sea que los edificios conformen una torre central cónica o cilíndrica  verticalmente.

3 Principios edilicios para generar energías conforme a las reivindicaciones anteriores, caracterizados porque las torres centrales o perimetrales, podrán adecuadamente revestirse interiormente (en casos excepcionales) donde o cuando estén sometidas a altas temperaturas o usos que impliquen corrosión química o impermeabilidad.






BREVE DESCRIPCION DE LA INVENCION

BREVE DESCRIPCION DE LA INVENCION
Básicamente se trata de edificios cuyas vistas en planta, conforman, por lo menos, una torre por cada edificio y una torre central, capaz de servir para generar grandes cantidades de energía por distintos medios, ya conocidos o parcialmente desarrollados. Estos medios pueden ser, entre otros, las torres ciclónicas o tornados, las llamadas torres solares, torres de convección, torres para el tratamiento de residuos sólidos, líquidos y gaseosos; torres de enfriamiento, torres de calentamiento, torres de cogeneración, etc. La problemática que plantean los medios de generación en torres de energía, son sus altos costos, las imperiosas estabilidades que las mismas requieren en sus partes subterráneas, y la seguridad para las grandes alturas. En cambio, estos nuevos principios edilicios ya tienen implícitamente, resueltos esos problemas y generan tanta más energía, cuanto más es la sección en sus centros y periferias, y cuanto más son sus alturas. Todos sabemos que para el desarrollo y el crecimiento es necesario construir viviendas, industrias y construcciones para múltiples usos. Las construcciones actuales son caras y no tienen retorno a nivel macroeconómico de los países. En cambio, construir estos espacios, a través de los principios edilicios aquí propuestos, sirven a los mismos propósitos de vivir y trabajar. Esta novedad tiene todo tipo de retornos y otros tipos de beneficios, a tal extremo que resultarán gratuitos y con rentas aseguradas para construir más e invertir en bienes y servicios terciarios, tales como el desarrollo socio-psico-cultural de vanguardia. Es decir que, la razón de ser de esta novedad, consiste en construir (los mismos espacios que hoy tanto necesitamos) de tal modo que resulten gratuitos para todos. Para que esto sea posible, habrá que llevar a la práctica estos nuevos principios edilicios, que serán un ángulo geométrico de proyección para la productividad, la rentabilidad, el hábitat, la urbanidad (bien entendida como cultura) y las energías limpias, abundantes, baratas y al alcance de todos. Estos edificios podrán contar con construcciones subterráneas para turbinas, generadores, etc. Así mismo para albergar equipamientos para otros procesos necesarios y para distintas industrias. Debidamente concebidos, evitarán ruidos y poluciones. Las construcciones cercanas al centro y las subterráneas servirán para propósitos no habitacionales, tales como propósitos industriales, tratamientos de basuras, efluentes, acopios, los propios de las generaciones de energías, etc. Por lo tanto, se proveerán entradas y salidas amplias hacia lo subterráneo. La torre central y las torres periféricas, podrán prolongarse mucho más alto que los techos, para aprovechar energéticamente el viento a grandes alturas, las energías convectivas y las solares. Las terrazas, los laterales y el perímetro externo, podrán servir para otras técnicas y medios. Esta novedad para edificaciones de medianas o grandes alturas, tienen ventajas comparativas, nunca alcanzadas hasta la fecha. Advierto que, en el mundo entero hay reticencia, indecisión y miedos en invertir capitales para emprendimientos de grandes generaciones de energía en torres. Los edificios aquí propuestos permiten tener lo más caro de esos emprendimientos energéticos en forma implícita. Es decir, tener la parte más cara (torre) y con más exigencias en costos, y de inercias estáticas a bajos costos o casi gratis. Así, podríamos decidirnos científica y técnicamente a investigar y mejorar lo que hoy es ya una realidad, y lo que hoy son solo teorías respetables, sin riesgos ni miedos. Podemos producir varias veces más energía que la necesaria, en forma barata, limpia y sin contaminar. Hay ejércitos de niños esclavos; gran parte del carbón que consumimos es extraído por ellos, y todo esto se puede revertir rápidamente en todo el mundo. 

DESCRIPCIÓN DE LOS DIBUJOS

BREVE DESCRIPCION DE LOS DIBUJOS

El dibujo nº 1 expresa la disposición en planta, de 12 edificios que convergen hacia un único centro. Este centro puede ser poligonal o redondo. Como así también, tener entradas de aire que se abren empujadas por el viento, y que se cierran en todos los demás sentidos del viento. También las entradas de viento pueden ser fijas, de tal modo que el viento solo ingresa en forma tangencial o semi-tangencial, y en la dirección del viento. De este modo el viento es obligado a girar dentro de las torres y no puede salir de ellas, solo podrá girar y acelerarse como lo hace un tornado. Una de las aplicaciones que implican estos edificios, es aprovechar la energía eólica en forma completamente diferente a los distintos aerogeneradores. Se trata de imitar los principios que utiliza la naturaleza, para generar  energía propia de ciclones, trombas, remolinos, huracanes y tornados. El viento sopla, tangencial, o semitangencialmente, sobre el centro de los edificios que se constituye en una torre tipo ciclónica. La altura de esta torre puede ser mucho mayor que la de los edificios, y su diámetro, dependerá del ancho y el largo de los edificios, de la cantidad de ellos y de los espacios que entre ellos se deje. El viento penetra en el centro de la torre, porque los edificios hacen de deflectores de los vientos, produciendo en su interior un tornado. Se crea un vacío y un centro de vórtice (llamado el ojo del tornado) que genera una gran succión debajo de la torre (sótano de los edificios) y se va produciendo un movimiento giratorio ascendente, que se acelera violentamente hacia arriba. Sus fuerzas, en el centro, pueden mover turbinas abajo, puesto que en el centro de estos tornados (1/7 del radio) su fuerza es 10 veces superior a las de las paredes de la torre. Puntualizaré a continuación algunas partes constituyentes. El nº 1 del dibujo nº 1 indica los edificios. El nº 2 del dibujo nº 1 indica las entradas de aire. El nº 3 del dibujo nº 1 indica la variante de que el centro de los edificios puede ser circular. El nº 4 del dibujo nº 1 indica que el centro convergente del aire no necesariamente debe ser circular, sino que puede ser polígonal. El nº 5 del dibujo nº 1 indica el centro generador de energía. El nº 6 del dibujo nº 1 indica deflectores fijos que permiten la entrada de aire, evitan la salida de él, y lo obligan a girar en un solo sentido; no se indican aquí las posibles entradas pivoteantes. En el nº 7 del dibujo nº 1 indica que arriba de los edificios, pueden instalarse torres solares por invernaderos o por  medios convectivos y otros. En el dibujo nº 1, el nº 7  también indica las torres en el extremo perimetral, de cada edificio, que pueden estar desde distintas alturas, empezar desde el sótano, o adosados a los edificios, como que también pueden anclarse aerogeneradores, teniendo en cuenta su tipo, a los efectos de ruidos. Como así también, otros medios de generación de energía. El nº 8 del dibujo nº 1 indica la parte de los edificios que se podrían usar preferentemente para acopios, industrias, turbinas y otros montajes e instalaciones. Los números 9, nº 10, nº 11 y nº 12 del dibujo nº 1 indican una de las posibles direcciones del viento, que captarán los edificios y que representan, por lo menos un tercio del perímetro que conforman el conjunto de edificios. Asimismo, que la cantidad de edificios deflectores, o sea, captadores del viento, son 5 y que según la escala del dibujo, abarcará un frente ventoso de 120 metros. Siendo el largo de los edificios 55 metros y su ancho 7,76 metros. El diámetro total del conjunto es de 140 metros y el tornado o centro es de 30 metros. Si los edificios son más anchos y hubiera más edificios, el centro podría ser de 100 metros de diámetro o más Estas medidas se pueden tomar como una simple hipótesis de una diversidad de edificios para generar energía, como así también bienes y servicios. Presento los dibujos nº 2, nº 3, nº 4, nº 5 y nº 6 que son distintas hipótesis o variantes de esta arquitectura convergente, para generar energía y lograr una multiplicidad de otros propósitos. El dibujo nº 7 representa e ilustra sobre posibles variantes de trazado urbano. Todos los dibujos responden a las numeraciones del dibujo nº 1. Esta novedad no pretende tratar todas las diversas utilidades y modos de producir energía, a través de estos nuevos principios edilicios para generar energía. Tampoco todos los bienes y servicios para lo cual son aptos estos edificios. En el dibujo nº 7, según su escala, plantea un distanciamiento entre cada conjunto de edificios, de por lo menos 150 metros entre ellos. Los espacios que dejan podrán ser agropecuarios o de invernaderos, para potenciar aún más la productividad en general, como así también aumentar la capacidad energética. Las medidas de cada edificio, la cantidad de edificios de cada conjunto y la altura de cada edificio, podrá ser igual o no a su conjunto. Las terrazas podrán ser planas o escalonadas, y más altas hacia el centro de cada conjunto de edificios. Uno o más edificios o parte de ellos, podrán ser más altos que el resto, para que la torre o hueco central quede más fortificado. Si se tratara de varios conjuntos de edificios (ejemplo dibujo nº 7) las distancias entre ellos podrán variar considerablemente. Mayores o menores distancias entre conjuntos pueden responder a las necesidades que se tengan en mira. En ámbitos rurales puede beneficiar una mayor distancia, incluso Km. entre ellos. Menores distancias pueden favorecer a otras necesidades y destinos. Distancias entre 300 y 400 metros pueden constituir metrópolis con centros diferenciados por rubros y sus usos. Edificaciones altas en medio de la producción agropecuaria pueden resultar bucólicas y aprovechar el sol, el viento, el paisaje, etc. El ámbito será saludable como lugar de trabajo y como vivienda. Los edificios hacia el centro son para producción. Las torres perimetrales, terrazas y los extremos exteriores y laterales pueden ser productivas y también  generar energía. El centro de los edificios es el principal generador de energía. El efecto coriolis influye en el sentido de giro de los tornados, por lo tanto, según los hemisferios, podrá invertirse la posición en planta de los edificios. Los laterales de los edificios pueden aportar otros tipos de energía. Para ello, los edificios pueden tener retiros, para entrada de luces donde instalar paneles fotovoltaicos. Los laterales pueden tener ventanas a modo de mansardas generadoras fotovoltaicas. A los efectos de una mayor sección de toma de aire, los edificios podrán, o no, tener balcones. Si los tuvieran, los mismos tendrán pisos. Los laterales y sus protecciones deben ser permeables al paso del aire. Es decir, podrán ser enrejados o protegidos lateralmente por mallas y estructuras metálicas. Los edificios podrán tener vistas hacia ambos costados y ser lo más largos posibles. Podrán tener locales o viviendas chicas, medianas o grandes hacia ambos lados. En la torre central y las torres perimetrales, en lo que emerjan por sobre los edificios, podrán montarse grandes aerogeneradores y placas fotovoltaicas, con o sin acompañamiento de los movimientos del sol. Las torres en su extremo superior (centrales o perimetrales) podrán tener generadores de succión del tipo Andreu–Enfiel con palas huecas o una parrilla para pulverizar agua. Algunas torres perimetrales podrán extraer agua, hacer de torres solares o usarse para otras producciones que no polucionen y sean silenciosas. Las torres perimetrales podrán empezar en sótanos o a nivel de la superficie, a mediana altura de los edificios, o sobre las terrazas de ellos. Dada la gran cantidad de energía, los laterales de los edificios podrán ser totalmente vidriados o con aperturas de grandes luces, ya que podrán contar con frío y calor en sus interiores. Los edificios podrán ser amigables con el medio ambiente, ya que las industrias con ruidos y contaminantes podrán ser soterradas, sin afectar las actividades limpias y las viviendas. Los tornados que se produzcan serán silenciosos, dada la firmeza y solidez del hormigón. Las torres podrán tener sobre las terrazas de los edificios, o en su coronación, los medios necesarios a cada función, para evitar emanaciones a la atmósfera, Así mismo, absorbedores de calor, convertidores de gases y recursos para destilaciones y/o condensaciones de aguas sucias, cogeneraciones en alturas y para producir combustibles y energías hidráulicas. Construir un solo conjunto de estos edificios, solo para finalidades industriales y/o servicios, permitirá deducir y experimentar mejor los espacios para los distintos usos aquí propuestos. Las sobreabundantes y, quizás, redundantes explicaciones que preceden, no todas hacen al fondo de esta novedad. Muchas de ellas ya no son novedad. Las explicaciones tratan de advertir las sustanciales ventajas económicas que esta novedad brinda y aporta a lo ya conocido. Debemos, así, advertir que, para generar energías, en torres, estas constituyen casi la totalidad del costo, y que aquí pueden resultar casi gratuitas, porque el resto de la obra los paga. Según dibujo nº 1 en sus 12 edificios (de 20 pisos) podrán habitar 10.000 personas. Estos allí podrán: trabajar, educarse, satisfacer sus múltiples necesidades, quedando aún, espacios para negocios, talleres, instituciones, industrias, etc. En la actualidad hay grandes ciudades que ocupan mucha superficie para pocos habitantes, y con pocas posibilidades de vivir bien. Esto equivale a desperdiciar las tierras como recurso físico. En cambio, con estos nuevos principios edilicios, aún los habitantes y trabajadores agropecuarios, podrán unirse, pertrecharse mejor, estar comunicados, tener energía abundante y, además, recibir los mismos servicios que los citadinos. En cien conjuntos como nº 1 por ejemplo, tendrán vivienda y trabajo un millón de habitantes. Un equipo multidisciplinario podrá dar las respuestas según sus usos y las zonas. Para una ciudad como Buenos Aires, trescientos conjuntos como el nº 1 alcanzan para albergar a todos sus habitantes y actividades. Lo mismo es válido para muchos otros sitios y ciudades. Se resolverían, así, todas las problemáticas, conforme lo antes expuesto.